Aún así, no quiero olvidarme de esos entrenadores-seleccionadores, que dirigen equipos de deporte base, como es el caso de Alfredo Fernández, seleccionador juvenil masculino de Asturias y al que esta semana hemos querido hacer una entrevista con la que os dejamos a continuación.
¿Es tu primer año como seleccionador?
No, es la cuarta vez que afronto un
Campeonato de España como seleccionador, por desgracia esta fue la única vez
que no pudimos jugar semifinales.
En 2001, formando tándem con Alberto Suárez,
fuimos Campeones de España Juveniles. En 2010 Bronce en cadetes
Jugar un campeonato de estas características
siempre es interesante. Cuando además ya llevas unos años en esto te sirve para
reencontrarte con mucha gente del balonmano de toda España.
¿Ejerce mucha presión sobre vosotros que el seleccionador júnior masculino sea asturiano?
Todo lo contrario, es un lujo tener a
Alberto Suárez como director técnico de Asturias. Su nivel de exigencia
deportiva se transmite a las selecciones asturianas, que, a pesar de la
limitación en cuanto al número de licencias, siempre estamos dando guerra en
los Campeonatos de España.
¿Qué jugadores destacarías de tu selección?
No me gustaría destacar a nadie ya que a
pesar de ser una selección tratamos de funcionar como un equipo. Si tengo que
acordarme de alguien es de los ausentes, nuestros dos centrales, Víctor
Tejerina y David Plaza que por dos lesiones traumáticas no pudieron acudir al
Campeonato de España. Ninguno de los jugadores que han actuado como centrales
en el campeonato de España lo son, pero han cumplido perfectamente.
¿Cuál era tu selección elegida para ganar el campeonato este año?
Está claro que Cataluña estaba un pasito por
delante de todos, creo que ha sido una justa campeona. Luego Madrid y Galicia
creo que también estaban un poco por encima de los demás, así que creo que la
competición ha sido bastante justa.
Castilla y León, Andalucía y nosotros,
podríamos haber estado perfectamente en semifinales, pero las bajas en estas
tres selecciones han hecho que no pudiéramos estar luchando por las medallas.
Euskadi ha sido la sorpresa agradable del
campeonato.
¿Qué objetivos tienes como entrenador?
Personalmente cuando me hago cargo de un
equipo mi objetivo es sacar el máximo del mismo, y trabajar con la máxima
seriedad posible. Los jugadores, sean de la categoría que sean, pasan un montón
de horas a la semana bajo nuestras órdenes, creo que hay que ser honrados con
ellos y dar nuestro máximo, no concibo entrenar de otra manera. No es una
cuestión de más o menos horas, las que se pueda en casa caso, pero las horas
que se empleen que sea para aprovecharlas al máximo para aprender, cosa que no
está reñida con pasárselo bien ni mucho menos.
Personalmente, tras 20 años en los
banquillos busco algún proyecto que me ilusione, si no no voy a entrenar.
Me ilusionaría un proyecto profesional con
un primer equipo que sea referencia y poder ir trabajando con la cantera, eso
es algo que nunca se debe olvidar.
Por mi formación como maestro y pedagogo me
encanta la formación de técnicos, cosa que creo que es fundamental para la supervivencia
de los clubes. Los jugadores son importantes, pero los técnicos más. Si te
quedas sin buenos jugadores, pero tienes técnicos, es cuestión de tiempo,
volverás a tener buenos jugadores y consecuentemente buenos equipos, si te
quedas sin técnicos te quedas sin club.
¿Es fácil compatibilizar tu trabajo diario con los entrenamientos?
Creo que es bastante complicado, mientras
estás estudiando es relativamente fácil, pero una vez en el mundo laboral, es
difícil. Por lo menos manteniendo el mismo nivel de exigencia en cuanto a
tiempo empleado, salvo que trabajes de 8 a 15h y el trabajo no requiera
demasiado desgaste.
Personalmente estuve trabajando como
educador social en un reformatorio, en ese tiempo no entrené, sólo alguna
colaboración. El nivel de desgaste personal que requería mi trabajo agotaba
toda mi paciencia, y para liderar un equipo el entrenador tiene que estar
fresco de mente, si eso no es así es cuando comienzan los problemas. Mucha
gente no se da cuenta de esto.
Desde que acabé de estudiar sólo he
entrenado de manera profesional o en colaboraciones que no requieran mucho
tiempo.
¿Cuál crees que es el secreto para ganarle a Cataluña?
Es muy difícil, tienen un nivel de jugadores
muy alto y encima Nacho Biosca en la portería que es un auténtico muro.
Lo que es imprescindible, es no perder
balones, si les regalas balones al contraataque son letales.
Hay que obligarlos a atacar en estático y
ahí estar muy bien.
Aparte de estos pequeños detalles, el factor
suerte también tiene que intervenir. Tiene que salirle todo a tu equipo y que
ellos no tengan el día, porque si ellos hacen lo normal, acabarán ganando.
¿Crees que un club con más poder adquisitivo opta a estar arriba en la tabla?
Evidentemente cuanto mayor poder económico
tenga un club podrá hacerse con mejor entrenador y jugadores, consecuentemente
hacer un mejor equipo y estar más arriba en la tabla.
No obstante un equipo tiene que tener “alma”
tener buenos miembros no nos asegura tener buenos resultados. Si juntamos un
grupo de “mercenarios” probablemente aquello no funcione.
En todo caso, la mejor inversión que debería
hacer un club es invertir en tener técnicos cualificados para trabajar con sus
categorías inferiores, por lo menos uno o dos que marquen la línea a seguir, de
tal manera que el dinero empleado en ellos revierta en el futuro del club, y en
“mimar” a sus jugadores de cantera en el equipo senior para que no quieran
irse.
¿Cuál fue el mejor campeonato al que has asistido?
No sé si el mejor, pero tengo un gran
recuerdo del Campeonato de España cadete del año pasado en Lalín, donde el
ambiente fue espectacular y conseguimos el subcampeonato de España, fue muy
especial.
¿Qué es lo que destacarías del balonmano?
Creo que es un buen producto muy mal vendido.
Esperemos que el Mundial sea un punto de
inflexión y que tras el seguimiento televisivo que está teniendo el público
demande balonmano, aumente el número de practicantes y de espectadores .
En balonmano no hay éxito sin trabajo, y en
eso creo que es bastante justo.
A nivel lúdico creo que es muy divertido, el
hecho de lanzar a portería, batiéndote en duelo con el portero, es una
sensación que engancha. El ganar una posición al atacante para que no pueda
lanzar desde donde quiera, interceptar un pase, etc, aunque a algunos jugadores
les da igual, también es divertido.
Tiene un ritmo muy vivo, todos atacan, todos
defienden, nadie se puede quedar parado.
Agradecer la colaboración de Alfredo Fernández en este blog y como no su tiempo.
Agradecer la colaboración de Alfredo Fernández en este blog y como no su tiempo.
Begoña Pedrido y Diana Mayo
