¿Cómo
llegas al mundo del balonmano?
En
mi colegio, La Enseñanza, en Valladolid. Fue de casualidad, un día
jugando con mi hermano había un entrenamiento de un equipo de
alevines al cual les faltaban jugadores, nos dijeron que si queríamos
ayudarlos y…hasta hoy.
Has estado en varios equipos de nuestros país, ¿con qué te quedas de cada uno?
Me quedo con todo de cada uno de ellos;
-A
nivel de formación mis años en La Enseñanza fueron fantásticos ya
que fui descubriendo el balonmano en sus diferentes facetas, de menor
a mayor nivel competitivo, así como los valores que aporta. El
disfrutar de jugar con mis amigos a nuestro deporte favorito.
-Posteriormente
viví el balonmano amateur en cuanto a remuneración, en el Lourdes,
jugando en primera división una temporada y 2 en división de honor
b, un proyecto nuevo en una ciudad donde había muchos jugadores que
no habían llegado, por una u otras razones a la élite, pero con una
calidad enorme.
-Estuve
en Chapela (Pontevedra) un año en división de honor b, con 21 años
salir de casa fue algo muy positivo y duro a la vez a nivel personal.
De allí conservo, grandes recuerdos y amistades.
-De
la SD Teucro mi recuerdo es el descubrimiento del balonmano
profesional durante dos temporadas en todas sus facetas, tanto las
buenas como las no tan buenas.
-De
CBm Villa de Aranda pues me quedo con todo, es el equipo más
importante de mi carrera deportiva, 11 temporadas, en el cual he
vivido y sigo viviendo experiencias únicas, la evolución de un club
hacia un sueño como el actual, mi identificación con una ciudad y
un club, así como el disfrutar de un ambiente único por parte de
nuestra afición.
De
los entrenadores que has tenido, ¿cuál es el qué más te ha
marcado y por qué?
Me
han marcado absolutamente todos, es un tópico pero realmente de cada
entrenador he aprendido mucho en diferentes aspectos del balonmano,
dentro de la pista y fuera.
Ahora mismo el Villa de Aranda está en los puestos bajos de la liga, ¿ves posible la salvación?
Si
lo veo posible, creo que estamos en ese camino, aunque muy duro para
un club humilde como el nuestro pero es factible. Hemos pasado muchos
meses muy difíciles pero ahora quedan tres jornadas en las cuales el
objetivo está a nuestro alcance.
¿Seguirás la temporada que viene en el club?
Todavía
no lo sé, a mi me gustaría, estamos en esos meses en los que se
planifica el futuro de las plantillas.
¿Qué destacarías de Jacobo Cuétara como entrenador?
Su
ilusión, exigencia y formación a la hora de involucrarse en un
proyecto como este. Además de un aspecto que quiero resaltar como es
su predisposición a ayudar a todos los jugadores de la cantera a
mejorar con una planificación especial para ellos, algo no común en
nuestro deporte por desgracia.
La semana pasada os enfrentasteis al Cangas en la Liga y conseguís un punto valioso, ¿cuál fue la clave para lograr ese empate?
La
clave fue confiar en nuestro estilo de juego, nuestra fuerza
colectiva, explotar al máximo nuestras virtudes en el juego y dar,
como siempre, el 100% en cada acción y hasta el último segundo. A
parte de un poco suerte que en partidos tan igualados también
influye.
En
Cangas pudimos ver como se desplazaba parte de vuestra afición a
animaros, ¿ayuda la afición a conseguir puntos como este aunque sea
fuera de casa?
La
afición para el club es fundamental, en todos los momentos felices
han estado ahí, orgullosos de su equipo, y en los días complicados,
de diferente ámbito, también han dado un paso al frente para apoyar
la continuidad del balonmano en Aranda.
Esta semana os enfrentáis, fuera de casa en la Liga Asobal, al Bm.
Valladolid, ¿cómo afrontáis este encuentro?
Con
mucha ilusión y responsabilidad, sabiendo que es un partido muy
importante, como todos para nosotros, y en el cual se pueden decidir
la consecución de objetivos.
¿Qué destacarías del Villa de Aranda como equipo?
La
fuerza de un colectivo que busca el rendimiento por encima de las
individualidades, así como la buena relación de un vestuario que ha
estado muy unido cuando hemos pasado muchos meses entrenando y
jugando “finales” con mucha presión.
En una semana donde descubrimos que dos entrenadores españoles se van a dirigir equipos extranjeros, ¿te planteas la posibilidad de jugar fuera de España?
En
la actualidad es una realidad que en otra época reciente casi ni se
valoraba pero que en estos momentos, los jugadores y entrenadores
debemos tener en cuenta como una opción más.
¿Cómo ves el balonmano español a día de hoy?
Es
un momento muy complicado al que hemos llegado. Opino que el mayor de
los problemas fue de gestión, de no sentar unas bases de
funcionamiento estrictas y sólidas en los momentos en los que hubo
capacidad económica para ello y solamente se buscó el rendimiento
deportivo al más alto nivel, a corto plazo y sobre unas estructuras
absolutamente amateurs. Sin embargo el mayor problema no será
superar esta gran crisis económica, que estoy seguro que se podrá
hacer antes o después, sino el no aprender de este momento actual
para un futuro del balonmano. Volver al modelo anteriormente vivido
de “falso profesionalismo” no sería nada bueno.
Cuando te retires, ¿te ves como entrenador de balonmano?
Es
una opción que no está descartada, de momento me he preparado para
entrenar a categorías inferiores y he tenido algún contacto con el
mundo de entrenamiento de base y el resultado me ha satisfecho. Sin
embargo, quiero seguir jugando al máximo nivel un par de años más y
entonces será cuando tome esa decisión.
¿Qué te gustaría conseguir como jugador?
Una
vez conseguido el sueño de ver a Aranda disfrutar de la LIGA ASOBAL,
poder disfrutar de un partido en competición internacional con mi
club o jugar alguna fase final de un torneo como la Copa del Rey por
ejemplo.
Muchas gracias, Diego.
Begoña Pedrido
Fotos cedidas por:
Arturo Sanz
Ángel Arcalle
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